La Basílica de San Juan de Letrán, una de las más antiguas de Roma, fue fundada en el siglo IV por el emperador Constantino y consagrada por el Papa Silvestre I.
La Basílica de San Juan de Letrán tiene sus raíces en el siglo IV, cuando fue fundada por el emperador Constantino.
Esta histórica iglesia fue consagrada por el Papa Silvestre I, marcando el inicio de su importancia como sede episcopal del obispo de Roma.
En el siglo IV, Constantino cedió un palacio en la zona de Horti Laterani al Papa, que se convirtió en la residencia oficial de la Iglesia. En este contexto, se fundó la Basílica de San Juan de Letrán, estableciéndose como un lugar emblemático de la cristiandad.
La consagración de la basílica por el Papa Silvestre I en el año 324 resaltó su importancia como sede episcopal y su conexión directa con la autoridad papal.
Este evento significativo marcó el inicio de su relevancia histórica y espiritual en la ciudad de Roma.
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La Basílica de San Juan de Letrán se distingue por su magnífica arquitectura, que combina elementos de diferentes épocas y estilos.
Francesco Borromini, arquitecto destacado del siglo XVII, dejó su huella en la basílica con un estilo barroco que se aprecia en cada detalle arquitectónico.
Las líneas curvas, columnas salomónicas y adornos ornamentales característicos del barroco embellecen el interior de San Juan de Letrán.
El interior de la basílica esta dividido en 5 zonas compuestas por más de 130 metros de largo.
Uno de los elementos más destacados son las monumentales estatuas de los doce apóstoles, esculpidas con maestría y realismo.
Cada estatua representa a un apóstol con sus atributos distintivos, contribuyendo a la atmósfera de veneración y devoción que caracteriza a San Juan de Letrán.
Otros lugares que ver en la Basílica son:
El baldaquino de la Basílica de San Juan de Letrán destaca por albergar en su interior las cabezas de los santos Pedro y Pablo, dos figuras fundamentales en la historia y tradición del cristianismo.
En el ábside se encuentra la cátedra, el trono episcopal del obispo de Roma en mármol y mosaicos.
El altar del Santísimo Sacramento está situado en el brazo izquierdo del crucero de la basílica de San Juan de Letrán. Fue construido durante el mandato del papa Clemente VIII.
El Claustro de San Juan de Letrán es una parte destacada del complejo del Palacio de Letrán en Roma.
Este claustro, de estilo renacentista, fue diseñado por el arquitecto Domenico Fontana en el siglo XVI.
Es conocido por su elegante arquitectura, con columnas dóricas y jónicas, y por sus frescos que representan escenas bíblicas y alegóricas. El claustro ha sido un lugar de contemplación y reflexión para los visitantes a lo largo de los siglos, y sigue siendo un sitio de interés tanto arquitectónico como espiritual en la Ciudad Eterna.
La Escalera Santa es una escalera de mármol ubicada en el Palacio de Letrán.
Según la tradición católica, estas escaleras son las mismas que Jesucristo ascendió durante su juicio en el palacio de Poncio Pilato en Jerusalén.
Fueron traídas a Roma en el siglo IV por Santa Helena, madre del emperador Constantino.
Si quieres visitar la Basílica de San Juan de Letrán, una de las iglesias más antiguas de Roma, necesitas conocer alguna cosas antes:
San Juan de Letrán esta abierta todos los días de 7:00 a 18:30.
La entrada es gratuita por lo que puedes acceder al interior sin necesidad de comprar o reservar ningún ticket.
Para llegar a San Juan de Letrán puedes hacerlo en metro y autobús.
En metro: La forma más rápida de llegar es tomar la línea A del metro (línea roja) en dirección a Anagnina y bajarte en la estación “San Giovanni”.
En autobús: Si prefieres tomar un autobús, puedes tomar el autobús número 81 desde la estación Termini y bajarte en la parada “Piazza San Giovanni in Laterano”.
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La ubicación exacta es Piazza di San Giovanni in Laterano, 4.
En este mapa puedes ver el lugar donde se encuentra la Basílica de San Juan de Letrán.
La Basílica de San Juan de Letrán fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1980, otorgándole un reconocimiento a su significativa relevancia histórica y cultural como lugar emblemático en la ciudad de Roma.
Esta distinción confirma su valor excepcional en términos de arquitectura religiosa y arte sacro, destacando su importancia como uno de los sitios más representativos de la tradición cristiana en el mundo.
Como catedral de Roma, San Juan de Letrán cumple un papel fundamental en la jerarquía eclesiástica.
Es el lugar donde el obispo de Roma, el Papa, tiene su sede episcopal, lo que le confiere un estatus especial dentro de la Iglesia católica.
La Basílica de San Juan de Letrán ha sido considerada tradicionalmente como la ‘Madre de todas las iglesias’ y la catedral del obispo de Roma, el Papa.
Este título honorífico refleja la conexión especial que existe entre San Juan de Letrán y la autoridad papal, siendo testigo de importantes eventos en la historia de la Iglesia.
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